Kakebo es un método de ahorro japonés muy sencillo. Para llevarlo a cabo es necesario contar con un cuaderno en el que convivan un calendario y una agenda, donde se anotan todos los gastos que se realizan a diario.
A la hora de comenzar el método de ahorro, se puede decidir cuánto dinero se quiere ahorrar cada mes, apuntando todos los gastos e ingresos, agrupando las compras en categorías y comprobando los resultados semanalmente.
Con el método Kakebo, los gastos se agrupan en diferentes categorías:
- Supervivencia: gastos indispensables para alimentación, salud, transporte, etc.
- Ocio y vicio: gastos relacionados con el tiempo libre.
- Cultura: enriquecimiento cultural y físico.
- Extras: emergencias, gastos especiales.
Para entender mejor cómo funciona el método Kakebo, este se puede resumir en seis pasos:
- Anotar todos los ingresos.
- Controlar los gastos fijos.
- Definir cuál es el objetivo de ahorro.
- Establecer un presupuesto.
- Hacer balance para comprobar si se han cumplido los objetivos.
- Rectificar, en el caso de que haya errores en los gastos y no se cumplan los objetivos.
El método Kakebo fue creado en el año 1904, cuando Motoko Hani, periodista y fundadora de la primera revista femenina en Japón, ideó este sistema con el objetivo de que las mujeres japonesas llevaran el control de la economía doméstica. Hani daba herramientas a las mujeres para ganar independencia en una sociedad que por aquel entonces se encontraba en pleno proceso de modernización.
En España, este manual de control financiero personal fue publicado por primera vez en 2014 por la editorial barcelonesa Blackie Books, que debido a su éxito llevó a cabo varias ediciones del libro. Existen numerosos tipos de kakebos en Japón.
Los modelos están dedicados a todo tipo de públicos, desde familias hasta adolescentes. En algunos de estos manuales, los usuarios simplemente pegan los tiques de lo que consumen. También hay diferentes aplicaciones de Kakebo para el móvil.