El Consejo de Ministros ha aprobado tres líneas de financiación para apoyar a pymes y al emprendimiento innovador que gestiona ENISA, organismo dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. En total serán 98,5 millones de euros que se distribuyen en tres líneas: Línea Enisa Jóvenes Emprendedores, Línea Enisa Emprendedores y Línea Enisa Crecimiento.
Esta partida permitirá la financiación de más de 600 proyectos empresariales con una inversión inducida estimada entorno a los 218 millones de euros.
Para la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, “ofrecer el necesario apoyo a las pymes y a quienes emprenden en nuestro país sigue siendo objetivo prioritario para el Gobierno, llevando a cabo políticas de palanca en las que ENISA, a través de sus líneas de financiación, resulta un agente fundamental para la recuperación y la transformación de nuestro modelo económico en la era postCOVID”.
Asimismo, José Bayón, CEO de la Empresa Nacional de Innovación ha manifestado que “ENISA volverá a estar a la altura del emprendimiento innovador, apostando por llegar al máximo número posible de proyectos con unas líneas que, sin duda, son garantía de éxito y también de futuro”.
Las líneas de ayudas al emprendimiento de Enisa
En 2020 el número de operaciones aprobadas a través de estas líneas fue 506, con una inversión de más de 83 millones de euros.
El número de solicitudes recibidas en 2020 experimentó un crecimiento del 11 % respecto a 2019. Esto ayuda a confirmar la importancia y necesidad de los préstamos participativos de ENISA. La cartera histórica de la entidad pública asciende a más de 7.000 préstamos desembolsados con más de 1.100 millones de euros invertidos. Por otra parte, son unas 6.300 empresas financiadas y beneficiadas.
Los préstamos participativos, con importes desde 25.000 € a 1.500.000 €, se asignarán a las diferentes líneas de financiación destinadas a emprendedores y pymes. Además, no se van a exigir más garantías que las del propio proyecto empresarial y un equipo gestor solvente.
Los proyectos han de estar ubicados en el territorio nacional, siendo financiables, para las solicitudes que se presenten en 2021. Tanto partidas que se hayan ejecutado desde 1 de julio de 2020, como las que se ejecuten hasta dos años después.